Entre brumas y haces de luz late un corazón | Mónica Olea

“Entonces te recuerdo, madre, con esa misma fidelidad.

Sentada en la cocina de tu casa, haciendo tus famosos fudges. Eran sin duda los personajes centrales en la escena culinaria de cada Navidad. Te recuerdo y... casi te toco. Tus dedos brillan de mantequilla, y tu mano dibuja, a cuchillo, expertos y rectos surcos sobre la superficie también brillante del chocolate. Nos vuelves locos a todos y lo sabes. Lo sabes, con esa mezcla de alegría por complacer, y el orgullo de ser la madre de la familia. Ambos sentimientos se te dibujan en el rostro, no lo puedes evitar. Y pienso...

Mi mamá me mima, amo a mi mamá”.

Un conjunto de escenarios inolvidables de viajes, poemas, evocaciones de seres queridos que ya partieron, momentos de crisis, instantes de iluminación y otros de alegría por los seres que han llegado, es el contenido de los textos y las imágenes que componen este libro.

A través de ellos, la autora nos invita a conocer otros escenarios: los que la habitan interiormente, en el más importante de sus viajes, el de su propia vida.